La unión de las diferentes generaciones se hace evidente, y las adversidades permitieron aprender de los más chicos, inspirándonos con su entusiasmo y amor por la patria. En un ambiente lleno de festividad, celebramos este día tan especial en horarios diferenciados para los niños y los jóvenes, reafirmando nuestro compromiso con la educación y el civismo.
La escuela se convirtió en un reflejo de nuestra nación, donde la diversidad y el orgullo nacional brillaron con fuerza. En esta jornada, no solo celebramos la independencia de nuestra patria, sino que también fortalecemos nuestros valores y enseñanzas en un contexto de comunidad y resiliencia.
